El domingo pasado, fuerzas Federales irrumpieron en un templo católico de Apatzingán, Michoacán, para deteneral presunto narcotráficante Miguel Ángel Beraza Villa, La Troca, justo cuando se realizaba una ceremonia de "XV años". Ante este hecho, La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) protestó “por la falta de respeto y violencia ejercida” por la Policía Federal, pues considera que lo acontecido representa una ofensa para con la fe de los presentes y puntualizó que "el fin no justifica los medios".
Considero que la posición de la CEM está totalmente fuera de lugar, pues la Iglesia Católica no goza de privilegios distintos a los de cualquier otra organización y más aún, los templos de dicha organización religiosa son propiedad Federal. Hace unas semanas, el Gobernador de Michoacán se escandalizaba ante la detención de varios miembros de la administración estatal en pleno Palacio de Gobierno. Ahora la Iglesia Católica se manifiesta en contra de las detenciónes dentro de los sitios que tiene a su resguardo.
¿Será que hay quiene en el discruso exigen seguir con el combate al crimen organizado, pero en sus acciones primero defienden sus intereses de grupo?
1 comentario:
Comparto tu posición al respecto, no hay por qué darles posiciones privilegiadas a ciertas iglesias, sólo por aglutinar mayorías. Es muy sabido de casos en los que clérigos mantienen relaciones con criminales, que retribuyen en grandes limosnas y privilegios. Ya basta de la impunidad en la iglesia! Nadie sabe lo que hacen con el dinero que posee, ni de donde viene ni a donde va.
R.
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